BATMAN: EL HOMBRE QUE RÍE: la sonrisa que lo cambiará todo

A día de hoy todos sabemos que ese gran superhéroe siempre tendrá un villano que le suponga un problema, un enemigo que le coloque contra las cuerdas y le haga enfrentarse a sus peores pesadillas para así resurgir más fuerte que nunca como un ave fénix. En muchos de los casos estos villanos suponen un importante peso en las historias de sus héroes creando una gran galería de enemigos con muchísima profundidad y gran carisma. Superhéroes como Spider-man y Flash cuentan con villanos tan increíbles como el Duende Verde o Reverse Flash respectivamente, que no hacen más que aportar calidad en las historias que salen; pero si hay un personaje que no sería nada sin sus villanos no es otro que el cruzado de la capa, Batman.

Por supuesto, Batman no sería nadie sin su contra parte, su yang, su némesis, su quebradero de cabeza y sí, no es otro que el inconfundible payaso sonriente, el Joker. Incontables veces son las que ambos han tenido enfrentamientos que han llegado a límites que rozan la locura pero, ¿cuándo fue la primera vez que se vieron las caras? Sin duda es algo que todos queremos ver.

Batman: El hombre que ríe (Batman: The man who laughs en original) escrito por Ed Brubaker, dibujado por Doug Mahnke y coloreado por Ryan Sook fue un cómic autoconclusivo publicado en 2003 que contaba el primer enfrentamiento entre Batman y su villano por excelencia, el Joker. Una historia bastante corta con la cual Ed Brubaker nos narra cómo Batman se las tiene que arreglar para parar a una nueva amenaza conocida como el Joker, que intenta volver loca a toda Gotham con su letal gas de la risa; pero no, no te hace reírte de forma descontrolada, sino que te mata de una forma horrible y dolorosa, gracias por esto, Joker…

Con este contexto Brubaker nos intenta diseccionar ambos personajes, profundizando tanto en el comienzo de un Batman que poco a poco va tomando esa posición de caballero de Gotham como con un Joker que lo único que provoca es caos y muerte a cada paso que da. No obstante, lo que encontramos es un guion simple y corto con una historia que no da por ello más de sí. Brubaker trata de profundizar en el conflicto y mostrarnos cómo ambos personajes se complementan de una forma u otra pero se queda muy a medias en el proceso. Con una narración buena y una historia que nos hace querer saber más, este cómic nos deja con una sensación de refrito; nos hace sentir que es otra aventura más de Batman con sus tópicos habituales que al final acaban dejando una historia entretenida y que poco más nos puede dar. Sinceramente, teniendo la posibilidad de mostrar algo tan importante y con tanto filón como el primer encuentro entre Batman y el Joker, nos da sensación de que se podría haber sacado mucha más chicha de esta situación, dejando la impresión de que Brubaker tiene puesto el piloto automático.

Aún con este problema, Brubaker sabe a la perfección plasmar ciertas referencias a otras historias de Batman, dando mayor profundidad y peso a esta misma. Cómics tan importantes para la continuidad de Batman como La broma asesina de Alan Moore o Año uno de Frank Miller se ven muy claramente representados, creando conexiones entre estas historias que compactan y aclaran los inicios del tanto del Joker como de Batman.

El dibujo en Batman: el hombre que ríe cumple; con trazos realistas Doug Mahnke nos plasma esa oscuridad tan característica de Batman, dejando una narración visual simple y dinámica. Aun cumpliendo en el dibujo, Mahnke nos deja con la sensación de que dibuja a medio gas; Cómics como 7 soldados de la victoria o Crisis final de verdad muestran la calidad que este dibujante puede ofrecer, y en esta historia está claro que no da todo lo que puede dar. Sin olvidarnos del color, Ryan Sook nos da unos tintes muy brillantes que chocan muy drásticamente con ese color tan negro que Batman siempre deja a su paso, plasmando esa lucha entre lo alocado y colorido del Joker y lo oscuro de Batman.

Con todo esto tenemos ante nosotros un cómic entretenido y que cumple al contarnos una historia más de Batman. Una historia que podía haber dado mucho más de sí y que nos deja con la sensación de que se ha quedado a medias. Recomendable para gente que empieza a leer Batman y busca conocer un poco más del trasfondo e historia de este personaje pero para la gente que busca algo más personal y complejo este cómic le puede dejar con mal sabor de boca.

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