Generación Friki
El panorama de la realidad virtual está cambiando, lo está haciendo muy rápido y cada vez atrae más miradas, tanto de empresas como de consumidores. Esta suele ser la mezcla necesaria para que un producto pase de ser algo de nicho a volverse masivo, y la VR está a un paso de conseguirlo.
Con la llegada de dispositivos de VR baratos (dentro de unos baremos) y accesibles como Oculus Quest 1 y 2 y Playstation VR, estos dispositivos se han empezado a hacer cada vez más famosos, y no es para menos, ya que la experiencia que ofrecen los juegos de realidad virtual es única y tremendamente satisfactoria. Sentirte dentro del videojuego y no un espectador que lo juega a través de una ventana es un cambio tan rompedor que realmente marca la diferencia en el mundo del videojuego; supongo que ya lo habréis oído más veces, pero sencillamente es algo que tenéis que experimentar por vosotros mismos para poder entender la increíble experiencia que supone jugar solo o con amigos a un videojuego en VR.
Por desgracia, ya sea por su precio, porque muchas veces requieren de hardware adicional, o porque necesitan una generosa cantidad de metros cuadrados disponibles para poder retozar en nuestros mundos virtuales a gusto, la realidad virtual sigue siendo una tecnología bastante restrictiva. También puede suceder que no te atrevas a comprar uno de estos dispositivos porque no sabes si te vas a marear, o cómo funcionará si llevas tus gafas graduadas puestas. Al final no hay nada mejor que probarlo por ti mismo antes de lanzarte a ciegas a comprar un montón de hardware.
Salas de VR como solución alternativa
En este caso siempre nos queda la opción de acudir a las cada vez más populares salas de juego de realidad virtual, que no sólo disponen del mejor hardware del mercado, sino también de espacios adaptados para que tanto tú como tus amigos podáis pasar una increíble tarde liberando alguna lejana colonia espacial de la invasión alienígena de turno.
Existen este tipo de salas de videojuegos de realidad virtual en Madrid y Barcelona, aunque cada vez es más común encontrarlas por todos sitios a lo largo y ancho de la geografía de España.
Sin duda es una genial alternativa muy a tener en cuenta antes de comprar un hardware que podría no ser lo que estás buscando, o simplemente que quieras experimentar la VR por poco dinero sin tener que adquirir un dispositivo completo. Y es que los juegos de VR son muy intuitivos en su mayoría, ya que no requieren complicadas combinaciones de botones y nos piden actuar con nuestro cuerpo como lo haríamos en la vida real, lo que los convierten en juegos perfectos para jugar con amigos o pareja aunque tengan muy poca o ninguna experiencia con videojuegos. Pasar una tarde pescando en un lago en la montaña, conduciendo un deportivo, defendiéndote de hordas de zombies o descendiendo unos fiordos en canoa son experiencias geniales para disfrutar con amigos, sobre todo si los tenemos en la misma sala.
Parte del futuro es VR, pero no todo
No hay nada que temer si lo que os gustan son los videojuegos clásicos, la realidad virtual no ha venido a destruir o dejar anticuada nuestra manera actual de jugar, sino a convivir con ella, tal y como lo hacen los smartphones, por ejemplo.
Los videojuegos de sofá seguirán existiendo durante mucho tiempo, la VR sólo aporta nuevas maneras de experimentar los videojuegos, quizá por eso la mejor forma de hacerlo por el momento podría ser a través de experiencias aisladas en salas de juego preparadas para ello, tal y como lo hacíamos en los 90 en las salas recreativas, al menos hasta que la tecnología termine de dar el paso que le falta para entrar de lleno en todos los hogares.
Finalmente, no hemos de perderle la vista a la VR durante los próximos meses, ya hablamos aquí de Half Life Alyx y de Lone Echo, dos de las mejores experiencias VR actuales, pero no las únicas, y es que para este 2021 se esperan muchos y muy variados juegos que lleven un poco más allá la experiencia de la realidad virtual. Por mi parte, estoy deseando sumergirme una vez más en Elite Dangerous VR para seguir explorando el universo tal y como harían Kirk y Spock en la Enterprise.
