Hoy por hoy, hay algunos padres que se extrañan de que sus hijos prefieran leer libros de historias fantásticas y épicas juveniles, jugar a videojuegos apropiados para su edad, pintar en cuadernos a sus dibujos animados preferidos o ver una y otra vez los viejos capítulos de “Bola de Dragón” a estar todos los días en la calle. Los adultos que se extrañan (se extrañan porque realmente no saben los aspectos que está desarrollando su hijo con esas actividades), se preguntan: ¿le pasará algo en el colegio? ¿no tendrá los suficientes amigos? ¿se meterán con él en clase? Ahora, soy yo la que me pregunto: ¿pero por qué piensan eso? Que sus hijos quieran leer historias fantásticas, que estén investigando cómo jugar a rol, que jueguen a videojuegos y que se tiren las horas muertas viendo animes, no es nada raro, ni malo. Y ni mucho menos tienen que tener problemas en el colegio.
Lo que deberían hacer los padres (que no digo que la mayoría no lo hagan) es respetar el espacio y los gustos de sus hijos y que no se preocupen si no hacen lo que los demás niños de su edad hacen. Y eso, (me refiero a no hacer lo mismo que los demás), es una notable ventaja y señales de que está formando su propia personalidad e identidad. Aparte de eso, algunos adultos tienden a pensar que esas actividades como leer ese tipo de historias, jugar a videojuegos y ver determinados animes son cosas de frikis. Y automáticamente lo ven como algo malo. Señores y señoras míos, ser friki, no es nada malo, ni un defecto. Más bien es todo lo contrario.
Padres míos, ser #friki, no es nada malo, ni un defecto. Más bien es todo lo contrario. Clic para tuitearPor eso, desde este post, voy a dar una lista de motivos a los padres que se sienten un poco preocupados por esas aficiones de sus hijos, de por qué ser frikis en el mundo en el que vivimos, hoy no es nada malo. Desgraciadamente, en los tiempos que vivimos actualmente, gran parte de las personas han perdido la ilusión, el optimismo y las ganas de luchar por sus sueños. Que haya niños frikis, significa que un futuro habrá adultos creativos, divertidos, con distintas perspectivas de las cosas, con ganas de emprender, y que estarán dispuestos a echar una mano a las personas si lo necesitan, porque, aunque los padres no lo sepan, esos libros que leen de historias de héroes es lo que enseñan: a diferenciar el bien y el mal.
Está claro, que el mundo friki es muy amplio y cada apartado tiene sus múltiples beneficios, pero yo, he decidido centrarme en los videojuegos. ¿Por qué en los videojuegos? Porque parece que los adultos los tienen demasiada tirria ( es como… ¡Vade Retro Satanás!) y no saben las numerosas ventajas que pueden tener (evidentemente si se juegan las horas justas y en el momento que sea adecuado) para el desarrollo íntegro de sus hijos. ¡Así que doy el pistoletazo de salida!
- Los niños que juegan a videojuegos de acción, serán capaces de tomar mejores decisiones y con mayor rapidez y eficacia.
- Los juegos de conducción requieren una gran memoria para conocer los circuitos y una mayor concentración para no salirse de ellos y llegar a la meta.
- Algunos, ayudan a que los niños hagan más actividad física, por ejemplo, en los videojuegos de deportes o de bailes de la Wii.
- Los niños que tienen dislexia (una dificultad de aprendizaje referida a la lectura), verían en muchos videojuegos una ayuda para trabajar su habilidad para leer.
- Según el videojuego que se escoja, los niños pueden mejorar y desarrollar la inteligencia espacial y el razonamiento y pensamiento lógico-matemático.
- Los juegos como el genial “Mario“, fomentan valores tan importantes como el trabajo en equipo y el compañerismo entre jugadores.
- Los juegos que requieren pintar y dibujar están favoreciendo el desarrollo de la coordinación óculo-manual de los niños.
- Puede que no lo sepáis, pero hasta hace nada los juegos eran todos en inglés. Ni os imagináis la cantidad de este dichoso idioma que se puede aprender con los videojuegos.
- Y por último, (más que nada, porque si no la lista se haría eterna), los videojuegos, inculcan a los niños la capacidad de investigar, de razonar, de crear y de pensar por sí solos.
La gente necesita a niños que jueguen a videojuegos, que lean historias fantásticas de aventuras, que les gusten los superhéroes, que les apasione disfrazarse. Porque esos niños, serán los que traigan de nuevo el optimismo, la creatividad, la ilusión y las ganas de perseguir los sueños, que actualmente gran parte de las personas han perdido. Papás y mamás del mundo: cuidad bien a vuestros pequeños frikis, porque sin duda alguna, tenéis a unos pequeños grandes genios en casa. Y eso, hoy por hoy, es el mejor y mayor tesoro de todos. ¡Por un futuro friki!
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