FIGURAS OCULTAS: ¿esconde algo o esto es todo?

¿Tú sabías algo de estas mujeres? Yo, ni idea. Es un poco difícil conocer a todas las grandes figuras que influyeron en el logro de los derechos civiles de los negros y su igualdad ante la ley pero, aún así, resulta sorprendente que nadie a mi alrededor y mucho más allá supiera de la existencia de estas tres mujeres.

Tres mujeres afroamericanas, trabajadoras de la Nasa, luchan cada una por ser reconocidas en sus espacios de trabajo, mientras trabajan en el proyecto de poner en órbita al astronauta John Glenn (interpretado por Glen Powell).

Sinceramente, fue el contexto en el que se da (la Nasa, carrera espacial, el Friendship 7, John Glenn…) los que me motivaron en un primer momento a ver Figuras ocultas (Hidden Figures 2016) pero fue la pseudo vergüenza de no saber nada de estas tres mujeres científicas la que me decidió ir a verla.

Todos meamos del mismo color

Sí, es otro biopic basado en hechos reales, y estoy hasta el moño de ellos, y es otra vez otra película sobre negros, por mucho que le cambiemos el contexto, ya que el trasfondo es siempre el mismo, intentando exprimir una vez más el tema de la opresión en pos de ganar una estatuilla (ahí tenéis esas tres nominaciones a los Oscars, igualitas a las de 12 años de esclavitud, será el procedimiento estándar con las pelis de negros: Mejor Película, Mejor Actriz de Reparto y Mejor Guión Adaptado). Y no dudo de que Octavia Spencer hace un buen papel, y de que el guión está bien adaptado, pero en general estos Oscars son un intento hipócrita de la Academia por justificar que en Hollywood no hay racismo (y me remito a las nominaciones de Oscars de estos últimos años). En fin, por ahí se rumoreaba que la ex-primera dama de EEUU tenía algo que ver en el tema.

Pero, afortunadamente, no es un melodrama, y quitando un par de escenas más dramáticas, las escenas más sentidas están desprovistas de pasión, son chapuceras, como para dar esa idea de cotidianidad, que es el mejor punto de la película. amenizado por buenas dosis de humor calculado y un ritmo pausado pero constante. La banda sonora, en este sentido, acompaña decentemente a todas estas escenas.

Y es que el racismo se da en Figuras Ocultas de una forma muy sutil. A través de miradas, silencios educados…Aunque sólo sea por el ambiente culto en el que se mueve la película, se prescinde del racismo agresivo e hiriente para ser más sutiles, como cuando ves un borracho y te cambias de acera. Esto lo podréis observar bien con la escena de la cafetera.

Figuras ocultas se mueve en ese entorno parecido al que vivimos en Descifrando Enigma, en el que se duda de la inteligencia o capacidad de una persona por ser diferente en algún sentido.

Un contexto histórico muy concreto

La película comienza a principios de los 60, en pleno apogeo de la Guerra Fría y de la carrera espacial, coincidiendo con la lucha de los derechos de los negros. El Movimiento Negro abarca desde 1955 con el asesinato de Emmet Till y el boikot de Rosa Park en los autobuses de Montgomery, hasta 1968 con el asesinato de Martin Luther King. Y, mientras ocurre todo esto, la película nos muestra el día a día del a comunidad negra dentro de la Nasa y sus vidas privadas.

El caso es que no estamos hablando de chicas cualquiera. El movimiento feminista negro en EEUU era tradicionalmente muy diferente del blanco. Mientras que las blancas pertenecían a la burguesía o clase acomodada, aquí las mujeres solían ser de clase baja y sufrían varios tipos de opresión a la vez. No obstante, la lucha que se nos muestra es en la élite de la raza negra. Algo así como el contrapunto a 12 años de esclavitud.

No debemos olvidar entonces que son mujeres educadas, muy listas, seguras por ello de sí mismas, y están en el contexto adecuado para luchar por sus derechos. Pensemos que dentro de la Nasa están las mentes más brillantes y educadas en todos los aspectos. Lo que se busca allí es inteligencia y al final la encuentran en el país o la raza que sea, como vemos en el ejemplo del ingeniero judío polaco, quedando fuera el racismo obtuso propio del analfabetismo, de la generalidad.

Por otro lado, también se muestra a una América que va perdiendo en la carrera espacial, y su mal perder, dispuestos a arriesgarlo todo en pos de ganar a Rusia, en lo que viene siento una metáfora bélica, que es la carrera espacial.

Y es que uno de los temas que más gustan a los americanos es hablar de América y al final, todas sus películas siempre son muy patrióticas. No obstante, no se puede negar que Figuras Ocultas se muestra muy correcta en cuanto a los acontecimientos históricos narrados, siendo del mismo modo muy fiel a nivel científico, aunque haciendo poco uso de efectos especiales (que son buenos).

¿Hacemos buen uso de los personajes?

Una de las cosas más interesantes es la inclusión de muchos personajes, los cuales tienen, más o menos, el mismo protagonismo. Las tres protagonistas son la genio de las matemáticas Katherine Johnson (interpretada por Taraji P. Henson), la futura supervisora de los servicios de IBM, Dorothy Vaughan (la varias veces nominada Octavia Spencer) y la ingeniera aeroespacial Mary Jackson (Janelle Monáe) y, aunque todas sufren discriminación, cada una lo lucha en su campo.

Sin embargo, no es su papel el que me llama la atención, sino el de sus parejas. Se presenta a todos los negros (Mahershala Ali, Aldis Hodge…) como juiciosos, comprensivos y cariñosos con sus mujeres (como si en aquella época no hubiera machismo), adoptando las mujeres blancas el papel de malas (Kirsten Dunst), los hombres malos el de prejuiciosos…en fin, tomando la película una clara discriminación positivo que da, en general, el papel de buenos a los de color y dejando a los blancos como intolerantes. Por supuesto, con la excepción de la figura de El Salvador que, si en 12 años de esclavitud era Brad Pitt y en Criadas y Señoras era Emma Stone, en Figuras Ocultas es Kevin Costner, (Al Harrison, director del Grupo de Tarea Espacial), atribuyéndole un papel cómodo que le deja en buen lugar.

El papel de Jim Parson (interpretando a Paul Stafford) es interesante pero está desaprovechado tanto el personaje como el actor. Es un papel que existe para fastidiar a la negra de turno y se mueve en unos baremos con los que cualquiera nos podríamos sentir identificados. ¿Quién no ha tenido un jefe cabrón?

¿Vale la pena ir a verla?

Por supuesto. Pese a que sea un biopic más que saque a relucir una vez más la falta de creatividad alarmante de Hollywood, vale la pena ir a verla. Es una película interesante, con actuaciones decentes, bien contada, que pese a no arriesgar en su desarrollo sí lo hace en su temática. Se mueve demasiado por la franja de la comodidad, pero lo que hace, lo hace en general bien.