Es curioso ver como en la época en la que vivimos, llena de remakes, demakes, reboots, secuelas y precuelas, a veces son las cosas más inesperadas las que son capaces de sorprendernos. Que DC va de batacazo en batacazo en lo que a sus películas de superhéroes se refiere no es ninguna novedad, Ahí tenemos a Batman v Superman, o a la bochornosa Suicide Squad, sin ir más lejos. Pero a veces son las películas más inesperadas las que vienen para salvar el día. Lego Batman: La película ha sido la luz en la oscuridad que DC necesitaba para salir de la espiral de mediocridad en la que andaba sumida.
Y tiene narices que haya tenido que ser una película de animación, y encima de Lego, y no una de imagen real la que haya llegado para salvar los muebles en la desastrosa carrera cinematográfica del sello de Superan, pero así están las cosas; donde Zack Snyder fracasa con su cheque en blanco en presupuesto y Ben Affleck a la cabeza, Chris McKay, un tío que ha dirigido cuatro películas de bajo presupuesto viene y te pasa la mano por la cara.
Lego Batman, por encima de todo, un homenaje.
Y es que desde el primer segundo del film, Lego Batman: La película se destapa como una comedia salvaje en la que absolutamente cualquier guiño y referencia tiene cabida, por muy evidente o metido con calzador que este sea, tanto es así que la película se burla de sí misma y de sus constantes alusiones.
El ritmo es frenético, con escenas de acción que no nos dejan ni un solo minuto y una sucesión interminables de gags que van desde lo más tontorrón al sarcasmo más mordaz, convirtiendo a Lego Batman: La película en un festival del humor friki y del fanservice.
Porque salta a la vista que Lego Batman: La película es un film que se ha hecho con el fan en mente, y no solo nos referimos al fan de Batman, franquicia de la cual habla sin tapujos de (todas) sus adaptaciones al cine, haciendo además algunos guiños a la clásica y tan infame como a la vez impagable serie de Adam West, sino al fan en general, rindiendo homenaje en situaciones, apariciones de personajes o referencias a muchísimos superhéroes de DC, pero también a otras sagas como Harry Potter, El Señor de los Anillos, Doctor Who, King Kong y un largo etcétera.
Divertida de principio a fin
Lego Batman: La película es, por encima de todo, una película que esta hecha para disfrutar, quedando muy lejos de otras obras pretenciosas y acaparadoras de estatuillas. La nueva peli del superhéroe de negro es consciente de que es un producto de puro entretenimiento y se aprovecha de eso para sacar partido de la situación.
Y aún con todo, entre tanto gag y tanto guiño, Lego Batman: La película todavía tiene algo de tiempo para dedicarse a desarrollar a sus personajes, explorando sus lados mas humanos y sus traumas desde una perspectiva diferente, dejándonos finalmente una moraleja muy bella pero que en ningún momento tiene la intención de ir más allá, o presentarse como una lección de nada.
Un doblaje con altibajos
Ya estamos bastante acostumbrados en España a los experimentos con gaseosa que hacen las compañías de marketing con las películas de animación; contratando estrellas de la TV para realizar doblajes y así acaparar la atención de la prensa, sin importar mucho el resultado final.
Lego Batman: La película peca de tener demasiados dobladores de pegote y con el único objetivo de vender reportajes. Ahí podemos ver a José Coronado o a Berta Vázquez destrozando las interpretaciones de Alfred y de Harley Quinn, entre otros.
Afortunadamente en la otra cara de la moneda tenemos a Claudio Serrano, el clásico y gran doblador de Batman tanto en el cine como en los videojuegos, un artistazo que nos regala una interpretación y registro de Batman muy similar a su versión original, impagable.
Empezando el año con buen pie
Sin duda 2017 se presenta como un año lleno de grandes estrenos, y Lego Batman: La película es uno de ellos, no os dejéis engañar por su aspecto, o por los horarios infantiles en los que algunos cines han encajado esta película. Lego Batman: La película es el mejor film que he visto en lo que llevamos de año, el único que ha conseguido hacer que salga de la sala con una sonrisa de oreja a oreja y de los pocos que me han sorprendido.
Finalmente, ya sea porque te guste Batman, DC, la animación, o simplemente la comedia, no puedes dejar de ver Lego Batman: La película, un film de derrocha calidad por sus cuatro costados y todo un homenaje a la cultura friki, indispensable.
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