Hay una escena en Piratas del Caribe: La venganza de Salazar en la que un pirata encerrado le cuenta a Jack Sparrow un chiste incluso después de que este le advirtiese que ya lo conocía. Sin importarle mucho la opinión de Jack, el pirata cuenta el chiste en alto para toda la cárcel y al finalizar, esta queda en silencio salvo por una única carcajada lejana.
No se me ocurre mejor forma de describir Piratas del Caribe: La venganza de Salazar que con esta escena; dos horas de un chiste que ya conocíamos y que en realidad no queríamos escuchar.
No soy quien para criticar que Disney sacase una de sus pocas franquicias originales de una atracción de feria, era el 2003 y era una locura, una de las pocas que Disney, que siempre camina sobre seguro, ha cometido en mucho tiempo. Pero pasan los años, hoy se hace cine sobre los emoticonos y remakes de los Power Rangers así que sacar un largometraje de algo que está en un parque de atracciones no suena tan raro en el mundo en el que vivimos ahora, solo 14 años después.
De hecho La Maldición de la Perla Negra resultó ser una película muy recomendable, que además rescataba el abandonado género de los piratas por todo lo alto; con sus peleas de espadas, sus abordajes, las damas en apuros y los mapas del tesoro.
Lamentablemente poco de eso queda ya en La venganza de Salazar, una película demasiado preocupada por introducir más espectáculo y fanfarria que sus secuelas, cuando lo que verdaderamente necesitaba era una vuelta a sus orígenes. Tampoco ha sido buena idea darle tanta coba a un Johnny Depp que interpreta su peor papel en la saga, con un Jack Sparrow que pasa de cómico a bufón, más parecido a un mono borracho que al intrépido y mordaz capitán de las dos primeras entregas.
Un barco que hace aguas
Piratas del Caribe: La venganza de Salazar va dando tumbos durante dos horas sin llegar realmente a ninguna parte; una sucesión de arcos argumentales que sirven más de conducto por el que introducir chistes y escenas de acción que para que la historia llegue hasta alguna parte. Por si fuera poco, las pocas sorpresas que nos tiene preparadas la cinta resultan ser un triple tirabuzón hacia atrás pasando por aro de fuego que, sinceramente, resultan salvajemente inverosímiles, incluso para una película de fantasía y piratas-zombies.
Vale, no todo es una mierda. Las escenas de acción están bien grabadas y, aunque cargadas de fantasía y situaciones imposibles, resultan entretenidas y visualmente muy atractivas. También el humor tiene sus momentos de lucidez, con algunos chistes que logran sacarnos una carcajada, e incluso el guion se sabe sacar un par de ases de debajo de las mangas que finalmente consiguen que la película no sea un absoluto desastre.
En cuanto a las actuaciones, como ya he dicho Johnny Depp está por debajo de su, ya de por sí baja media. Javier Bardem, en el papel de Armando Salazar hace lo que puede con un personaje que básicamente se pasa toda la película con cara de estar castigado sin postre. Quizá son los nuevos fichajes, Kaya Scodelario y Brenton Thwaites (Carina Smyth y Henry Turner) los que junto con Geoffrey Rush (Héctor Barbossa) destacan algo más en sus papeles.
Piratas del Caribe: La venganza de Salazar no deja de ser una película palomitera para ver en familia, una de esas en las que los piratas no son malos y que el robo de un banco puede acabar con una persecución a lomos de un edificio tirado por caballos. Nada de esto está mal en realidad, sencillamente que La venganza de Salazar no deja de ser el mismo chiste que ya escuchamos con La maldición de la Perla Negra repetido por quinta vez, un chiste de esos que ya solo le hace gracia al que lo cuenta, y en el fondo todos sabemos que él se ríe porque, al fin y al cabo, va a seguir haciendo un montón de millones por contarlo.
[amazon_link asins=’B0723CPC57,B074NYB9RM,B06XKVLKD8,B074SGPQK3′ template=’ProductCarousel’ store=’generacionfri-21′ marketplace=’ES’ link_id=’b0848169-b5c8-11e7-a4c3-65e981b78bfb’]Piratas del Caribe: La venganza de Salazar
Destaca en:
- Algunos chistes sueltos
- Las escenas de acción
- Que en esta no sale Penélope Cruz
Podría mejorar:
- Los giros argumentales son de chiste
- Todo en la cinta son situaciones que ya habíamos visto en las anteriores.
- Se la ve venir desde el título, predecible hasta la arcada.
- No esperéis nada de Orlando Bloom.
Un comentario
Pingback: LA LADRONA DE LIBROS: un cuento sobre el Holocausto -