MR. ROBOT: Error #404: Elliot not found

Que las series de televisión están en uno de sus mejores momentos no es algo que se pueda poner en duda, y si bien shows como The Wire o Los soprano alcanzaron un nivel de popularidad relativamente elevado no fue hasta la llegada de la magnífica Breaking Bad allá por el 2008 cuando la cosa comenzó a ponerse seria.

Y es que la serie protagonizada por Bryan Carston y Aaron Paul se llegó a convertir en todo un fenómeno de masas, acumulando premios y adeptos por igual y consiguiendo unos niveles de audiencia ridículamente altos conforme avanzaba.

Sería un poco exagerado achacar el éxito de las series de televisión a la emisión de Breaking Bad, pero también sería estúpido ignorar la influencia que tuvo en el imaginario popular y que, junto con el boom de Netflix y otros servicios , cambió la forma de ver series drásticamente.

Dentro de esta inabarcable marea de series en la que nos movemos puede ser difícil decidirse por algo en concreto y no es raro que uno acabe perdiéndose obras estupendas por el simple hecho de no saber de su existencia.

Cuando nos decidimos a ver Mr. Robot

Mr. Robot nos sorprendió a todos en 2015 con su mezcla de política, hackers y las movidas mentales chungas que se montaba Elliot (Rami Malek), su protagonista. El estupendo argumento, la genial narrativa y la buena calidad general de la serie la coronaron como una de las grandes de 2015, llegando a ser considerada por muchos como la mejor del año.

El final de temporada de Mr. Robot dejo a más de uno con dolor de cabeza (y con las ganas de ver cómo continuaba la cosa) y tras un largo año de espera la segunda temporada de la serie ya se encuentra entre nosotros.

¿Merece la pena verla? ¿Esta a la altura de la primera temporada? ¿Aporta algo nuevo? Vamos a descubrirlo.

Antes de nada, y por mucho que me duela, (y, si sois seguidores de la web, sabéis que digo la verdad y que esto es una excepción) debo advertiros que este artículo contiene spoilers de la primera temporada de  Mr. Robot, no es que os vaya a destripar la serie, pero si no la habéis visto deberíais dejar de leer y poneros a verla inmediatamente.

La segunda temporada arranca de forma algo confusa, si hacemos un poco de memoria recordaremos que el grupo hacker liderado por Elliot “Fsociety” consiguió cargarse la base de datos del gigantesco conglomerado “E corp”, y si bien esto supuso un duro golpe para la empresa (y la economía global) E corp está lejos de estar acabada y va a dar mucha guerra a lo largo de la temporada.

Elliot por su parte no lleva nada bien lo de ser un esquizofrénico lleno de paranoias, y tras descubrir que Mr. Robot (Christian Slater) no es más que un personaje inventado por su mente enferma decide recluirse en un lugar seguro para intentar “curarse” siguiendo una estricta rutina libre de ordenadores y dispositivos digitales que puedan despertar a su hacker interior.

Mientras tanto Darlene (Carly Chaikin) se encarga de dirigir Fsociety en ausencia de Elliot, Angela (Portia Doubleday) está trabajando para E corp y Tyrell (Martin Wallström) sigue en paradero desconocido.

Como veis se ha montado un cipostio increíble, y si lleváis un tiempo sin acordaros de Elliot y compañía es posible que estéis algo perdidos al principio. A pesar de que la trama sigue siendo tan compleja como siempre (y de que, de hecho, se llega a complicar bastante más) lo cierto es que la serie hace un gran trabajo a la hora de contarnos una historia que, a pesar de la gran cantidad de personajes, organizaciones y fuerzas políticas que participan en ella, resulta interesante en todo momento y mantiene el misterio en cada capítulo, algo que encaja de maravilla con el tono deprimente y gris de la serie.

Por otra parte hay que decir que se acentúa tremendamente el contraste entre la parte más política y hacker de la serie y los problemas mentales de Elliot.

Y es que en esta temporada vamos a ver a un Elliot más frágil que nunca, atormentado por la presencia de Mr. Robot y por las consecuencias de sus acciones contra E corp. Una fragilidad mental que se traduce en una gran cantidad de momentos introspectivos y monólogos internos en los que Elliot hace gala de su habitual (e involuntario) humor negro y su cínica visión del mundo lo que, sumado a los momentos a los momentos más locos de la serie, hace que Rami Malek nos regale una interpretación absolutamente magnífica, muy en la linea de lo que vimos en la primera temporada pero elevado a la enésima potencia, siendo este uno de esos papeles que parecen haber sido creados para el actor que lo interpreta.  El Emmy al Mejor Actor está más que merecido.

En cuanto al resto del reparto, todos realizan un trabajo estupendo, con actuaciones por encima de la media de lo que podemos encontrar en otras series, y aunque ninguna interpretación esta a la altura de la de Rami Malek, se puede destacar la actuación de Christian Slater en el papel de Mr. Robot, un rol que le sienta como un guante y del que consigue sacar mucha más chicha de lo que puede parecer en un principio.

Y si hablamos del apartado técnico lo único que se puede decir es que es excelente, con una fotografía increíble y una selección de música totalmente adecuada para el carácter de la serie, que no sólo se conforma con ser buena, sino que se esfuerza en ofrecer algo diferente, con planos muy originales e inspirados (sobre todo durante la intro, que es diferente en cada episodio) y con experimentos muy locos, como un capítulo recreado con estética de sitcom noventera (y si, es tan divertido como suena).

#MrRobot es una serie que juega con las expectativas del espectador Clic para tuitear

Donde la serie flojea, y esto es algo que volverá locos a muchos, es a la hora de cerrar tramas, me explico: esto no es un problema en la mayoría de las series, al fin y al cabo es frecuente que este tipo de productos se guarden lo mejor para el final. Pero es que Mr. Robot pasa olímpicamente del tema, es una serie que juega con las expectativas del espectador, con lo que sabe, lo que no sabe y lo que cree que sabe, y gracias a esto se dedica a volvernos locos durante los 12 episodios que dura esta temporada.

Lógicamente se solucionan algunos cabos sueltos, pero la sensación general al terminar la temporada es que estamos más liados que al principio. Esta sensación de no saber lo que va a pasar a continuación ni con qué locura nos va a salir Elliot es uno de los grandes atractivos de la serie (que se esfuerza por hacernos sentir tan locos como su protagonista) pero puede que para muchos no resulte agradable que se rían en tu cara, algo que hay que tener en cuenta.

Pues así están las cosas a estas alturas

Mr. Robot es una serie diferente que se pasa por el forro la norma no escrita de que hay que recompensar al espectador cada cierto tiempo y a la que no le importa volvernos locos con cada nuevo e inesperado giro de guión. ¿Os pareció que el final de la primera temporada era una locura? Pues preparaos porque esta vez os van a dar lo mismo multiplicado por dos. Una temporada estupenda que, si bien podría ser más generosa a la hora de aclarar las cosas, esta a la altura de la primera, con una trama interesante, unas actuaciones espectaculares y un apartado técnico de 10. ¿Merece la pena darle una oportunidad a la segunda temporada de Mr. Robot? La respuesta es un rotundo “Si”, pero en VO a poder ser.