Es posible que el estilo de los Salones antiguos no vuelva y con ella la esencia también se pierda. No quiere decir que ahora no tengamos cosas buenas pero el estilo de consumo rápido nos impide disfrutar de las competiciones, las charlas o incluso de los concursos de cosplays. Quizás sea hora de reflexionar y preguntarnos, ¿qué es lo que hacía grande a esta cultura que nos apasiona?