No todos tuvieron la suerte de poder probar en la Madrid Games Week la demo de “Star Fox Zero” que se encontraba en el stand de Nintendo; los pocos muebles dedicados a este juego y los numerosos cuelgues de la demo sólo permitieron que unos pocos elegidos pudiéramos ponerle la mano encima a lo nuevo de Fox MCloud y sus amigos antropomórficos. Por suerte nosotros pudimos echarle el guante un día antes y dedicarle todo el tiempo que se merece a uno de los lanzamientos de Nintendo más fuertes para comienzos de 2016 (recordemos que se retrasó para febrero).
Lo primerísimo que llama la atención nada más comenzar son los extasiantes 60 frames por segundo que mantiene el juego en todo momento de la partida, tanto en el mando como en la pantalla principal, lo que se traduce en un feedback jugable del más alto nivel y una sensación de juego robusta y firme como una roca; Nintendo nunca defrauda en este sentido.
El nivel que pudimos jugar era el de Corneria, clásico ya en la saga “Star Fox“. A los que vengan de su fantástica entrega en N64 les resultará tremendamente familiar este nivel, ya que copia la estructura general de la ya añeja versión del juego para la 64 bits de Nintendo, si optábamos por enfrentarnos al jefe que nos ponía en “all range mode”, o sea, el sistema de libertad de movimientos que tenía la versión del título de Nintendo 64 y que este “Star Fox Zero” coge prestada y mejora para la ocasión.
No nos gustó tanto la simpleza gráfica con la que se resuelve el título. Mostrar 60fps en pantalla más 60 fps en el mando, lo que suma unos escandalosos 120 frames por segundo a renderizar por la abnegada y poco esplendida GPU de Wii U le pasa factura sin duda al apartado gráfico en general, que denota unos acabados demasiado angulosos y unas texturas extremadamente simples para los tiempos que corren. Y aunque aún le quedan unos meses de desarrollo, mucho me temo que el apartado gráfico va a ser el que menos cambie de aquí al lanzamiento del título. También podríamos poner ligeramente en entredicho el diseño artístico del título, que sumado a la pobre poligonización de todo hace que el “Star Fox Zero” desmerezca más de la cuenta.
Lo mejor de Star Fox Zero: su jugabilidad; sencilla, rápida y divertida. Clic para tuitearSin embargo sí que tenemos que partir una lanza a favor de “Star Fox Zero” cuando hablamos de su jugabilidad; sencilla, rápida y divertida para un juego que en cuanto llevemos un par de minutos a sus mandos sabrá engancharnos de manera irremediable, transmitiendo ese mismo feedback que sus hermanos mayores. Un videojuego sencillo de jugar, con una jugabilidad clásica bien adaptada a los tiempos que corren y el buen hacer que le saben impregnar Nintendo y Platinum a todas sus obras.
Es difícil hablar mal de un juego de Nintendo y Platinum, sobre todo cuando a cambio de unos gráficos mediocres nos entregan una tasa de refresco total de 120 fotogramas por segundo, todo un record para cualquier juego de esta generación. Estoy seguro de que estos meses de retraso que se han tomado servirán para terminar de redondear un juego que los fans llevábamos pidiendo ya muchísimos años, y que no sé vosotros, pero yo lo espero con muchas ganas.